¿Qué es la tortícolis congénita?

La tortícolis , también conocida como cuello torcido , es una afección en la cual el cuello del paciente está anormalmente torcido, dejando la cabeza en un ángulo asimétrico. A menudo es doloroso y difícil girar la cabeza desde esta posición.

Hay dos categorías de tortícolis: adquirida y congénita . Congénito significa que el paciente nació con la condición. Mientras que la tortícolis adquirida puede ser causada por varias cosas, desde la cicatrización del tejido muscular hasta los ganglios linfáticos inflamados , la tortícolis congénita generalmente ocurre porque el músculo esternocleidomastoideo del bebé, que corre por el costado del cuello, es demasiado corto y apretado.

Pronóstico de la tortícolis congénita

En la mayoría de los casos, la tortícolis congénita se puede superar con el tiempo si se trata correctamente con ejercicios de estiramiento y cambios simples en la forma de sostener al bebé.

Síntomas de tortícolis congénita

El síntoma clave es la posición de la cabeza, inclinada hacia un lado con la barbilla apuntando hacia el hombro opuesto. En tres de cada cuatro bebés con cuello torcido, el lado derecho del cuello se ve afectado. Otros síntomas incluyen:

• Rango limitado de movimiento en la cabeza y el cuello.
• Se puede sentir un bulto blando en el cuello del bebé durante las primeras semanas después del nacimiento, que desaparece gradualmente. No parece causar dolor al bebé.
• Un lado de la cara puede aplanarse debido a que el bebé duerme en el mismo lado todo el tiempo.

La tortícolis muscular congénita generalmente se nota dentro de las primeras seis a ocho semanas después del nacimiento, a medida que el bebé adquiere más control sobre su cuerpo, pero tiene problemas con la cabeza y el cuello.

Varios bebés nacidos con cuello torcido también tienen displasia de cadera del desarrollo. Esta es una condición donde el hueso del muslo se ajusta holgadamente en la articulación y puede salir fácilmente del encaje de la cadera.

¿Cuáles son las causas de la tortícolis congénita?

La causa exacta del cuello torcido no está clara, pero algunos piensan que está relacionada con la posición del bebé en el útero o durante el nacimiento, lo que lesiona el músculo del cuello. La tortícolis congénita parece ser más común en los primogénitos, que tienen menos espacio en el útero que sus hermanos posteriores.

Tratamientos para tortícolis congénita

El tratamiento puede depender de la edad del niño y la gravedad de la enfermedad. En la mayoría de los casos, la primera línea de tratamiento es un régimen de ejercicios de estiramiento para alargar el músculo esternocleidomastoideo del bebé. En general, esto implica que el padre gire suavemente la cabeza del bebé, según las instrucciones de un médico o fisioterapeuta.

También se puede alentar al bebé a que practique estirar el músculo colocando los juguetes, de modo que tenga que voltear la cabeza para verlos, o sentarse sobre su lado limitado, de modo que tenga que volverse para mirarlo.

En alrededor del 10% de los casos, estos métodos conservadores no son exitosos y se puede recomendar una cirugía .

¿Qué tipo de especialista trata la tortícolis congénita?

Los pediatras , los fisioterapeutas pediátricos y los cirujanos pediátricos pueden participar en el tratamiento de la tortícolis congénita.