Diatermocoagulación

¿Qué es la Diatermocoagulación?

La diatermocoagulación, también conocida como rizólisis o rizotomía, es un proceso que implica principalmente la aplicación de calor a un punto específico. Con la aplicación de este calor, los nervios a cargo de transmitir el dolor dejan de hacerlo.

Este tratamiento se realiza bajo anestesia local y de forma ambulatoria.

¿Por qué se realiza la diatermocoagulación?

La diatermocoagulación está indicada en casos donde el equipo médico cree que la causa del dolor de espalda es causada por los nervios cerca de la columna vertebral.

Por lo tanto, esta técnica neuroablativa se aplica en pacientes en quienes los tratamientos conservadores han fallado y la molestia en la espalda es duradera, lo que impide que el paciente tenga una vida normal.

La técnica se usa para aliviar el dolor en casos donde el dolor está bien localizado y el dolor no se irradia a otras áreas del cuerpo. Por otro lado, en el caos donde el paciente siente una pérdida gradual de fuerza, sensación o reflejos en ambos brazos y piernas, el origen del dolor puede ser diferente, por lo que no se realizará la diatermocoagulación.

¿Qué es la Diatermocoagulación?

Es un proceso simple que se lleva a cabo de forma ambulatoria, es decir, sin necesidad de ingreso hospitalario; bajo anestesia local y con la ayuda de una radiografía o ultrasonido.

En primer lugar, y para confirmar el diagnóstico y determinar que el dolor se origina en las articulaciones facetarias, los médicos pueden infiltrar o bloquear los nervios afectados con anestésicos y esteroides antiinflamatorios. El paciente debe notar una mejora sensible. De lo contrario, la fuente del dolor no estará en la columna vertebral y deberá tratar de encontrar un diagnóstico adecuado.

Si hay una mejoría, la diatermocoagulación de los nervios se realizará semanas después. En condiciones normales, la técnica se repetirá con varios pinchazos en diferentes niveles de la espalda.

Preparación para la diatermocoagulación

Diathermocoagulation no requiere ninguna preparación especial. El paciente debe informar al especialista sobre cualquier problema que tenga y los medicamentos que está tomando.

Si el paciente fuma, se recomienda que él o ella no fume durante las horas previas a la intervención.

Cuidado después de la diatermoagulación

Este procedimiento generalmente es un proceso indoloro. Es posible que el paciente sienta cierta incomodidad en las punciones, pero generalmente con el uso de anestésicos locales se resuelven. Si no se produce ninguna anomalía durante la operación, el paciente se irá a casa unas horas después de la operación.

En la mayoría de los casos, el paciente puede regresar a la vida normal solo unas pocas horas después de someterse al procedimiento. Todo lo que se necesita es descansar, aunque el tiempo de descanso puede variar de paciente a paciente.

Después de salir de la sala de operaciones, el paciente puede sentir una sensación de hormigueo en el área, aunque esto es completamente normal. Es común que los pacientes no noten ninguna mejoría durante los primeros días, ya que es común que el efecto de la diatermocoagulación se note desde la primera o segunda semana después del procedimiento.

Alternativas a la diatermocoagulación

Los avances tecnológicos están a la orden del día en medicina y manejo del dolor. Existen varias técnicas no quirúrgicas que pueden resolver problemas de dolor de espalda.

La neuroestimulación medular, la estimulación transcutánea (TENS) o la denervación por radiofrecuencia son solo algunos ejemplos.

12-12-2023
Top Doctors

Diatermocoagulación

¿Qué es la Diatermocoagulación?

La diatermocoagulación, también conocida como rizólisis o rizotomía, es un proceso que implica principalmente la aplicación de calor a un punto específico. Con la aplicación de este calor, los nervios a cargo de transmitir el dolor dejan de hacerlo.

Este tratamiento se realiza bajo anestesia local y de forma ambulatoria.

¿Por qué se realiza la diatermocoagulación?

La diatermocoagulación está indicada en casos donde el equipo médico cree que la causa del dolor de espalda es causada por los nervios cerca de la columna vertebral.

Por lo tanto, esta técnica neuroablativa se aplica en pacientes en quienes los tratamientos conservadores han fallado y la molestia en la espalda es duradera, lo que impide que el paciente tenga una vida normal.

La técnica se usa para aliviar el dolor en casos donde el dolor está bien localizado y el dolor no se irradia a otras áreas del cuerpo. Por otro lado, en el caos donde el paciente siente una pérdida gradual de fuerza, sensación o reflejos en ambos brazos y piernas, el origen del dolor puede ser diferente, por lo que no se realizará la diatermocoagulación.

¿Qué es la Diatermocoagulación?

Es un proceso simple que se lleva a cabo de forma ambulatoria, es decir, sin necesidad de ingreso hospitalario; bajo anestesia local y con la ayuda de una radiografía o ultrasonido.

En primer lugar, y para confirmar el diagnóstico y determinar que el dolor se origina en las articulaciones facetarias, los médicos pueden infiltrar o bloquear los nervios afectados con anestésicos y esteroides antiinflamatorios. El paciente debe notar una mejora sensible. De lo contrario, la fuente del dolor no estará en la columna vertebral y deberá tratar de encontrar un diagnóstico adecuado.

Si hay una mejoría, la diatermocoagulación de los nervios se realizará semanas después. En condiciones normales, la técnica se repetirá con varios pinchazos en diferentes niveles de la espalda.

Preparación para la diatermocoagulación

Diathermocoagulation no requiere ninguna preparación especial. El paciente debe informar al especialista sobre cualquier problema que tenga y los medicamentos que está tomando.

Si el paciente fuma, se recomienda que él o ella no fume durante las horas previas a la intervención.

Cuidado después de la diatermoagulación

Este procedimiento generalmente es un proceso indoloro. Es posible que el paciente sienta cierta incomodidad en las punciones, pero generalmente con el uso de anestésicos locales se resuelven. Si no se produce ninguna anomalía durante la operación, el paciente se irá a casa unas horas después de la operación.

En la mayoría de los casos, el paciente puede regresar a la vida normal solo unas pocas horas después de someterse al procedimiento. Todo lo que se necesita es descansar, aunque el tiempo de descanso puede variar de paciente a paciente.

Después de salir de la sala de operaciones, el paciente puede sentir una sensación de hormigueo en el área, aunque esto es completamente normal. Es común que los pacientes no noten ninguna mejoría durante los primeros días, ya que es común que el efecto de la diatermocoagulación se note desde la primera o segunda semana después del procedimiento.

Alternativas a la diatermocoagulación

Los avances tecnológicos están a la orden del día en medicina y manejo del dolor. Existen varias técnicas no quirúrgicas que pueden resolver problemas de dolor de espalda.

La neuroestimulación medular, la estimulación transcutánea (TENS) o la denervación por radiofrecuencia son solo algunos ejemplos.

Este sitio web utiliza Cookies propias y de terceros para recopilar información con la finalidad de mejorar nuestros servicios, para mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias, así como analizar sus hábitos de navegación. El usuario tiene la posibilidad de configurar sus preferencias AQUI.